San Alejo de Roma o San Alejo mendigo, muerto en 412, es venerado como santo por la Iglesia Ortodoxa y católica. Según la leyenda, Alejo era hijo de patricios romanos y fue prometido con una mujer virtuosa que, la misma noche de bodas, le convenció para que renunciara al matrimonio a cambio de una vida librada a la piedad y la fe. Alejo lo aceptó y se fue a Siria, donde se ganaba la vida pidiendo limosna.
Diecisiete años después volvió a Roma, a casa de su padre a pedir limosna, pero nadie lo conoció. Acogido como mendigo, vivió durante 17 años más en su casa, sin ser reconocido, rezando y enseñando el catecismo a los niños. Dormía bajo la escalera de la entrada, donde podemos verlo en esta estampa, antes de morir, momento en que escribió su historia en un papel, tras lo cual su padre le abrió la mano para tomar el papel y leerlo, dejándolo sorprendido al darse cuenta que era su hijo.
Estampa xilográfica , con bonita iluminacion de epoca. |